Un debut expansivo que imagina el futuro a partir del folclore.

Guitarricadelafuente… Muchos son los elementos de Álvaro Lafuente que remiten a sus raíces, comenzando por el diminutivo de su nombre artístico, que fluye desde el pueblo aragonés de sus abuelos. O esa inseparable guitarra acústica que también le bautizó. Por eso, la sofisticación que afronta adquiere en su música una dimensión especial: fascinante y seductora. El Guitarrica de ahora se doctora desde una originalidad extrema, la misma que le convierte en uno de los artistas más prometedores de la nueva década.

En 2022 estrena La cantera, su álbum debut. Con canciones que ya no salen directamente de las seis cuerdas, sino que se someten a un cuidado proceso creativo y se reinventan en el estudio. Es un nuevo Guitarricadelafuente, pero es el mismo. El de ese estilo tan personal que le hizo explotar desde la muy casera El conticinio (2018), ahora sin tapujos para flirtear con la electrónica y los sonidos urbanos.

El álbum arranca con Mil y una noches, una declaración de intenciones donde su raíz se cruza con una estética pop-urbana y electrónica sutil. Le sigue la atmosférica Amanita, que confirma la nueva dirección sonora. El disco avanza mostrando sus dos caras: la exploración, con el latido de Caballito y el impulso bailable de Quién encendió la luz; y la de raíz, donde brillan Ya mi mamá decía y la delicada Flor de caramelo. Hacia el final, Vidalita del mar abre paso al cierre con A carta cabal, un epílogo íntimo y confesional.